domingo, 27 de febrero de 2022

Vivir en paz

 

Este fin de semana acabamos de celebrar la peregrinación anual de la diócesis en el santuario de Nuestra Señora de la Paz. Siempre es necesaria la paz, la de las naciones, la de las familias y la interior de cada uno. Pero ciertamente, en los últimos tiempos y esta semana claramente, es algo que nos toca a todos el corazón. Ver como por distintos intereses, la mayoría de las veces económicos, somos capaces de comenzar conflictos bélicos, es algo espeluznante. La mayoría de la gente de esta zona no tiene ni idea de donde se encuentra Ucrania, igual que mucho europeo no sabe donde está Benín. Todos quedamos muy lejos los unos de los otros. Pero esta gente sí sabe lo que es vivir la violencia, que te arrebaten lo poco que tienes por la fuerza, e incluso vivir con miedo a causa de atentados terroristas en nombre del yihadismo, recientemente hemos sufrido varios atentados en suelo beninés. Por lo que no les cuesta nada sentirse solidarios y conmovidos por todos los conflictos que aparecen en distintas partes del mundo, y rezan con profunda confianza en el Señor, para que vuelva a instaurarse la paz. Quizá este problema global lo estamos creando entre todos, lo digo en el sentido de que si fuéramos más generosos y mirásemos menos nuestros propios intereses, a lo mejor habría más concordia en nuestro planeta. Vivamos sin violencias.