lunes, 24 de octubre de 2011

Al borde del camino

Hace unas semanas, cuando estábamos haciendo nuestras distintas labores por la misión, vinieron a avisarnos que había una mujer al borde del camino que estaba muerta. Era una mujer del pueblo de al lado, de Siki. Efectivamente la conocíamos, se llamaba Felicite y estaba esperando un crío, era de la comunidad católica. Por lo visto había dado a luz esa noche, el crío salió bien, pero ella tenía muchas hemorragias. Como la cosa no se cortaba la subieron a un taxi, pero no a ella sola, sino un taxi de los que va parando por los pueblos y llenándose de gente, animales y distintas cosas. El caso es que no llegó a hacer 6 kilómetros de los 50 que le separaban del hospital más cercano y murió en el taxi. De allí la bajaron y la dejaron al borde del camino. Todo esto ocurrió habiendo parido en la maternidad. Nosotros nos dedicamos a construir dispensarios médicos cuya mayor utilidad es su uso como maternidad. Con eso se han reducido bastante las muertes de las parturientas, pero aun así falta mucho por hacer. El problema es que en los dispensarios, sólo hay una ayudante de comadrona, si hay suerte comadrona, pero no hay médico, no hay material para operar, no hay sangre para hacer transfusiones, etc. Por lo que cuando viene un problema en el parto se suele mandar de manera urgente en un taxi al hospital de referencia. Muchas noches nos toca hacer de ambulancia en la misión pues no hay ningún coche disponible. Aun sabiendo el alto riesgo que corren a la hora de tener hijos, hay que ver con que ilusión llevan sus embarazos, con que alegría reciben la maternidad y que claro tienen que la vida es un regalo. Al niño de Felicite lo han llamado Moisés regalo de Dios. No hace mucho, todavía queda gente con esa costumbre, al niño lo hubiesen abandonado para que muriera por ser el causante de la muerte de su madre. Hay que ser valiente para ser madre, pero en África es jugarse la vida.

miércoles, 19 de octubre de 2011

La amistad verdadera necesita algo más que tiempo

Isidro con sus chavales de Buka

Mi amigo Isidro, sacerdote de la SMA se ha marchado a Niger. Esta es la opción de la SMA española, van a ir a evangelizar aquel país. Me quito el sombrero ante esta opción que hacen, aunque aquí se les echará de menos. Todavía recuerdo el día que nos conocimos, cuando yo estaba recién llegado a estas tierras y mi maleta cayó al suelo. Yo la recogí y le di unos golpes para quitarle algo de la tierra con la que se había ensuciado. Al ser presentado a Isidro, éste dijo, no cabe duda de que eres el nuevo pues todavía te molestas en limpiar la maleta. Esto lo dijo en tono de sorna y guasa. Fue con él con quien baje a arreglar los papeles de residencia y con quien empecé a conocer un poco Cotonou. Me contó su historia y como llevaba unos años solo en la misión de Buka, algo que a mí me parece que ha tenido que ser duro. Me comprometí en ir a hacerle visitas para ir acompañándole de vez en cuando y así lo he hecho a lo largo de este año. Como ya conté, fuimos hasta en bicicleta a verle. Lo cierto es que Isidro y yo somos muy distintos, probablemente en España no hubiésemos llegado a quedar muchas veces, pero aquí aprendes a ir a lo esencial e importante y una vez más, descubres que la amistad no se puede basar en cosas superficiales. Deseo a este buen misionero de Plasencia que siga dando caña allí donde va y moviendo conciencias. Como ya le dije un día, me alegro de esta larga amistad que nos ha unido, pues aunque no ha sido mucho el tiempo, sí ha sido intensa y por eso perdurará.

lunes, 3 de octubre de 2011

Primer día de escuela

Tres alumnas con su material para el primer día de clase

 Por fin hoy ha comenzado la escuela, tanto primaria como secundaria. Digo por fin, porque se suponía que tenía que haber empezado el día 15 de septiembre, pero en este país la seriedad con las fechas no es su fuerte. Aunque en los últimos años ha habido una mejora substancial en cuanto a propuesta educativa, por ejemplo ahora es gratuita toda la primaria, la realidad dista mucho de ser buena. Seguimos teniendo un gran déficit de profesores bien preparados. Por poneros un ejemplo, hay gente dando clase que no tiene ni el bachiller aprobado. Durante el curso, por las circunstancias más variopintas se suspenden las clases con demasiada facilidad. La atención a los alumnos es deficiente, etc. El resultado es que muchos alumnos, aun habiendo aprobado el curso, no tienen el nivel mínimo que les correspondería. Aun así, las cosas van mejorando, hay una propuesta de que en una serie de años todos los maestros sean titulados, pero para eso habrá que pagarles un sueldo digno (de los de aquí) y no tengo claro que esos recursos existan. Todavía estamos sensibilizando a la población e insistiendo en la importancia de que sus hijos vayan a la escuela y se preparen para el futuro. Gracias a Dios cada vez son más los chicos que van a la escuela, pero falta mucho por hacer. Uno de los mayores problemas es la cantidad de chicas que dejan la escuela a muy temprana edad por quedarse embarazadas. A partir de mañana veremos por toda la zona los colores caki del uniforme de todos los alumnos de escuelas públicas. Hoy iban de calle, con el material escolar para el primer día que no es otro que la azada. Sí, una azada cada chaval con la que poder quitar las hierbas de la escuela y adecentar el entorno.