Puerta en recuerdo de los esclavos que salieron de estas playas |
En la preciosa playa de Ouidah encontramos una puerta con un arco. Se llama la puerta del no retorno. Los esclavos que llegaban aquí, pues había algunos que ya morían en el trayecto hasta la playa, subían a pequeñas embarcaciones para poder alcanzar los grandes barcos que les trasladaban hacinados hasta el nuevo mundo. Muchas veces los pequeños barcos se hundían y todos perecían. En los grandes barcos las condiciones del viaje eran infrahumanas y también morían muchos de los esclavos. Se calcula que sólo llegaban vivos la mitad de los esclavos al continente americano. El haber llegado a la playa y subir a los barcos significaba que nunca más volverían a ver su tierra. Me pregunto si tal como vivimos, no estaremos ante la puerta sin retorno de nuestras vidas. Hay ocasiones en las que si nos metemos en ciertas dinámicas de la vida, luego es casi imposible salir de ellas y volver a la senda que nos permita realizar nuestros sueños profundos.