Con un poco de retraso respecto al calendario escolar español, he vuelto a comenzar las clases. Phillipe es un chaval de 22 años, que da repaso por las tardes a las alumnas de la casa de las monjas, viene todas las mañanas de lunes a sábado y está conmigo entre dos horas y dos horas y media. Lo que hacemos es leer la misa en francés y en Battonum. La idea es que me enseñe a pronunciar bien en los dos idiomas y así poder celebrar yo solo la eucaristía. Las clases las comenzamos el miércoles de la semana pasada. Ya estamos dando algo de gramática del Battonum que es la lengua de los Bariba, el fulfulde que es la lengua de los peel y los gando lo dejaremos para más adelante, aunque ya se saludar también en esa lengua. Algo que necesito es poder comunicarme, por como soy yo y porque para poder transmitir la Palabra de Dios y el anuncio de la Buena Noticia es necesario. Pero no conozco mejor lenguaje para eso que el del Amor, así que me dedico a sonreír, jugar con los niños y ser cercano en mi forma de expresarme con el lenguaje no verbal.