jueves, 30 de enero de 2020

Enamorado


 
Jacques a la entrada de su primera choza en Fô-Bouré 1971
La semana pasada estuvimos de ejercicios espirituales los sacerdotes que trabajamos en la diócesis de N´Dali. El que dirigió los ejercicios fue el padre Jacques Julia, fundador de la parroquia de Fô-Bouré el 15 de agosto de 1971. Tuve la oportunidad de charlar un buen rato con él, y como es lógico me preguntó por la parroquia y sus gentes. Nos contó un poco su historia y nos confesó que los años de misionero que con más cariño recordaba, fueron los dieciséis años que estuvo en Fô-Bouré. Sigue sorprendiéndome y dándome cierta envidia aquella primera evangelización. Sigue maravillándome las condiciones en las que vivían los misioneros. Carecían de casi todo, pero eso no les hacía parar en su labor cotidiana. Muchos dejaron su vida en estas tierras, la mayoría por enfermedades que aquí no se podían curar. Auténticos héroes, o mejor dicho, locos por el Evangelio, auténticos enamorados de aquello que intentaban vivir lo más fielmente posible. Con 84 años me sorprendió la gran memoria que tiene Jacques, su salud ya no le acompaña, sobre todo una enfermedad que tiene en los ojos que le está dejando ciego. Tiene que ir a Francia a hacerse una revisión y tiene miedo de que no le dejen volver. En la actualidad no realiza una labor descomunal como antes, pero tiene sus pequeños proyectos y su pequeña comunidad a la que atiende. Lo que no ha disminuido ni un ápice es su amor por esta tierra y estas gentes, por lo que quiere seguir sembrando la Palabra de Dios.