Querido lector de este humilde blog, lo primero es pedir disculpas por mi retraso en manteneros informados sobre la actividad en la misión, aunque a decir verdad, mi compromiso original es el no pasar más de quince días sin escribir y todavía estoy en fecha.
El domingo pasado celebrábamos la festividad de Pentecostés, con tal motivo el sábado tuvimos la celebración de las confirmaciones en nuestra parroquia. Ciento cuarenta y siete confirmandos, de todas las edades, procedencias y condiciones sociales ( los hay que se defienden, los hay pobres o muy pobres). En cualquier caso una fiesta. Recibieron al Espíritu en plenitud, pero yo me pregunto si eso sirve para algo.
El obispo recibido por la comunidad y los confirmandos |
Jesús cuando se presenta resucitado a los apóstoles les ofrece la Paz de Dios, “ la paz esté con vosotros”, esta paz la da el Espíritu de Dios, esa paz interior que tantas veces falta en nuestras vidas. Siempre de un lado para otro sin pararnos un rato a disfrutar de lo verdaderamente importante. Esa Paz la necesitamos todos, pero la gente de aquí tiene más conciencia de ello pues lo conflictos serios, la vejaciones personales y el menosprecio por parte de otros, les hace caer en la cuenta de que solamente Dios, a través del Espíritu, les puede devolver la Paz.